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ILUMINACIĆN
(ayuda de Dios para conocer las ideas)
Existen 3 niveles de conocimiento:
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CONOCIMIENTO SENSIBLE:
Cuando el alma es consciente de los cambios del cuerpo. El verdadero conocimiento, consiste en el conocimiento de los objetos inmutables del interior del alma.
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CONOCIMIENTO RACIONAL:
Partiendo de los datos sensibles, realiza unos juicios comparƔndolo con los modelos eternos= ideas. Esto nos distingue a los seres humanos del resto de los seres.
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CONTEMPLACIĆN:
Es la dialĆ©ctica platónica (percibir las ideas tal como son). Las sensaciones son privadas (ej.: lo que para ti puede ser frĆo, para mi puede ser buena temperatura), pero las verdades universales son comunes para todosā las encontramos en el nivel racional. Estas verdades tienen que estar iluminadas, ya sea por el sol en el caso de Platón (sol=bien) o en el caso de San AgustĆn, por Dios.
INTERIORIZACIĆN
La bĆŗsqueda de la verdad comienza ā interior.
La verdad estĆ” en nuestro interior.
El punto de partida se halla en la AUTOCONCIENCIA.
Descubrimos que:
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Nuestra naturaleza es variable.
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Nuestro conocimiento sensible ofrece concimientos mutables.
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Dios ilumina al ser humano para que alcance el conocimiento de la verdad.
LA HISTORIA
Los bĆ”rbaron entraron en Roma, aƱo 410, y la destruyeronā no entienderon como pasó y buscaron culpablesā CRISTIANOSā no defendĆan Roma si no a su Dios = La culpa era del Dios cristiano y no de los dioses paganos.
San AgustĆn, intentó escribir un libro desmintiĆ©ndolo y como respuesta a los ataques paganos. ā "La Ciudad de Dios".
LAS DOS CIUDADES
ApologĆa frente a cristianos y paganos. San AgustĆn reflexiona sobre el sentido del dolor y del mal en la historia. Establece que la historia de la humanidad es una lucha en 2 ciudades (bien y mal):
ciudad de Dios y ciudad del Mundo
ciudad de la luz ciudadad de las tinieblas
En las que se distinguen los que aman a Dios por los que desprecian a Dios
dos tipos de seres humanos: encima de todo cultivando su egoĆsmo
Estas dos ciudades, aparecen mezcladas y al final de la historia se separarƔn.
Hay una serie de disputas hasta que gana la ciudad de Dios. Los elegidos formarĆ”n la ciudad del verdadero Dios. Por ello aparecen juntas e inseparables hasta el dĆa del juicio final.
Algunos que no son enemigos de Dios, serÔn aceptados como hijos de Dios; en cambio, muchos que aparecen como buenos no podrÔn alcanzar la salvación.
Por lo tanto, la salvación la conseguirÔn quienes dejen todo por Dios.
AYUDA DE DIOS
CONOCIMIENTO ACCIĆN
verdad bien
falso mentira
Iluminación Gracia
evita caer en el error evitar el mal
Ćø Ćø
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